jueves, 13 de marzo de 2008

ODONTOGRAMA



Denominados también como Diagramas dentarios o Dentogramas Es obvio decir que resulta demasiado largo escribir el nombre completo de cada uno de los dientes. Por lo tanto, para hacer referencia a ellos en las relaciones o historias clínicas, se han ideado algunas formas o diagramas para hacer su registro por medio de signos, que sustituyen sus nombres con toda precisión y, a la vez, se ahorra espacio y tiempo. Desgraciadamente, estas formas son muy variadas y algunas más complicadas de lo que se deseara; por lo mismo, sólo se citarán las más usadas.



El diagrama de Zsimondy (1861), conocido también como diagrama de cuadrante, tiene varias modalidades: 1.Usa números arábigos 2.Usa números romanos, 3. Usa letras mayúsculas del alfabeto, y es el más común por sencillo y accesible; no obstante, se citará el diagrama sancionado por la F.D.I, en 1970. Los números arábigos sirven para designar la dentadura adulta y los romanos y las letras para designar la infantil. De la siguiente manera:


8 7 6 5 4 3 2 1 1 2 3 4 5 6 7 8
8 7 6 5 4 3 2 1 1 2 3 4 5 6 7 8


V IV III II I I II III IV V
V IV III II I I II III IV V



Este diagrama es el más empleado. Las dos rayas que se entrecruzan representan la posición de las arcadas: la línea horizontal corresponde a la división entre la arcada superior y la inferior, y la perpendicular a la línea media que demarca el lado derecho del izquierdo, efectuándose la observación desde la proyección vestibular. Los números designan a cada diente según su posición.



CARIES RECURRENTE



Hay dos indicadores válidos para caries recurrente o secundaria: La integridad del margen de la obturación se verifica con el uso de un explorador con presión suave. Si el margen se desmorona o se traba el explorador estamos en presencia de un defecto pequeño. ( 0,4 mm de diámetro). Los defectos grandes están asociados con un nivel alto de colonización bacteriana cariogénica. El decoloramiento marginal solo, no es una señal válida de caries recurrente.


Se diagnostican las caries recurrentes siempre que encontremos un defecto de la integridad del margen (tejido dental reblandecido o pérdida de sustancia), y cuando la punta de una zona periodontal puede entrar en el defecto sin resistencia. Una restauración con un margen desteñido o un defecto marginal pequeño (<0.5>onda) se clasifica como lesión cariosa temprana. Un defecto más grande debe ser clasificado como lesión cariosa avanzada, ver debajo.

PLACA BACTERIANA



Todavía son pocas las personas que hacen sistemáticamente la higiene adecuada de sus dientes. La consecuencia es que se le junten microbios en los dientes y que tengan placa bacteriana. No se ve, no se siente. Pero está ahí esa masa blanca constituida por infinidad de microbios y por residuos alimentarios descompuestos, causa de la inmensa mayoría de los problemas dentarios. El mejor tratamiento para la placa bacteriana es baratísimo. Sólo se trata de cepillarse correctamente, con el hilo dental como su aliado esencial, imprescindible, en el combate contra la placa, enemiga N°1 de sus dientes.

Fácil hasta que la placa se calcifica y forma el sarro, que facilita la acumulación de más placa en un ciclo sin fin. Consulte al profesional, su dentista podrá hacer el test de la placa, que consiste en un colorante que da color rojizo, por ejemplo, ese gran enemigo de los dientes.
Esto permite que usted lo vea y se disponga mejor a que el dentista le sugiera un plan de salud bucal, con controles periódicos. Su dentista puede complementar la higiene diaria que usted haga con limpiezas profesionales. No sustituyen la cotidiana del paciente.


En las regiones más difíciles de acceder, como entre las encías y los die
ntes, justamente donde más se forma placa bacteriana, además de caries suceden inflamaciones que terminan en “piorrea”. La placa acumulada entre los dientes, es de difícil acceso al cepillo, pero no al hilo dental. El profesional puede usar pastas apropiadas o la vibración de un aparato de ultrasonido. Las limpiezas hechas por odontólogos terminan con un pulimento de los dientes que, además, remueve manchas causadas por el tabaco y por colorantes artificiales de caramelos y alimentos.

CALCULO DENTAL

El cálculo dental es la placa mineralizada adherente que se forma sobre la superficie de los dientes, generalmente se clasifica de acuerdo con su ubicación relativa al margen gingival lo que nos lleva a clasificarlo en cálculo supra gingival y cálculo subgingival.


Cálculo supra gingival es la expresión usada para referirse al que se forma por encima del margen gingival, mientras que el subgingival se refiere al que se forma por debajo de este. El cálculo supra gingival, se encuentra más frecuentemente cerca de las glándulas salivales principales y su composición química varía en las distintas zonas de la boca, es de un color blancuzco o amarillento, es duro pero friable y se lo elimina fácilmente con el detartraje. Así es común ver cantidades copiosas del cálculo supra gingival en vestibular de los molares superiores, en la vecindad de la abertura del conducto de Stenon de la parótida y en lingual y aun vestibular de los incisivos inferiores frente al orificio del conducto de Warton de la submandibular y del conducto de Bartholin, de la sublingual.


La determinación del cálculo subgingival, por estar por debajo del margen de la encía, requiere un sondeo cuidadoso con un explorador. En cantidades suficientes es visible al examen radiográfico. Generalmente está presente en pequeños depósitos que no muestran preferencia particular por la cercanía a los conductos de las glándulas salivales. Es denso y duro, de forma aplanada, marrón oscuro o verde oscuro, entre pardo y negro y está muy firmemente adherido a la superficie de los dientes. La composición del cálculo subgingival depende menos del sitio de formación que la del cálculo supra gingival. Anteriormente se denominaba al cálculo supra gingival y subgingival, como cálculos salivales y serosos respectivamente, estos nombres reflejaban la creencia de que el primero se originaba de la saliva y el último del suero sanguíneo sin embargo ahora la mayoría de los autores creen que la saliva es el origen de ambos tipos de cálculo, aunque el fluido gingival puede específicamente desempeñar un papel más importante en la producción de cálculo subgingival.